Hace poco terminé uno de los mejores
libros que leí en mucho tiempo: 1984
de George Orwell. Más allá de la gran e innovadora idea de este
tipo, que nació en India en 1903 (colonia británica entonces) y
escribió el libro en la segunda década de 1940, me llamó mucho la
atención que en todo el relato menciona pocas veces al fútbol, aún
cuando Gran Bretaña es un Imperio (como Orwell diría) muy
futbolero.
Esto no parece demasiado lógico si
tenemos en cuenta que Orwell fue a una escuela inglesa desde los 13
años, la Eton College, en Berkshire. Pero evidentemente, la
educación británica no sólo no lo hizo futbolero, sino que todo lo
contrario.
En 1945, Orwell escribió un ensayo que
se llamó El
espíritu del deporte en el que básicamente desacredita
cualquier beneficio de practicar deporte y además cataloga a los
choques entre selecciones de fútbol y cricket (dos de las
actividades que menciona en el texto) como una simple forma de
consolidar el concepto de Estado-Nación que había surgido algunos
años antes.
Hay dos citas de El espíritu...
en las que el escritor británico se refiere a esto:
- “El
fútbol es un juego en el que todos salen lastimados, y que cada
nación tiene su forma de jugarlo, por lo que es injusto con los
extranjeros”.
- “El fútbol no tiene nada que
ver con el juego limpio. Está lleno de odio, celos, autoadmiración,
desprecio por las reglas y placer sádico para ser testigos de la
violencia. En otras palabras, es la guerra sin disparos”.
Pero además, en ese mismo ensayo,
Orwell hace referencia a Arsenal FC, que ese mismo año, 1945,
recibió al equipo soviético Dynamo de Moscú para jugar un
amistoso. El partido se jugó en White Heart Lane (el estadio de
Tottenham), y terminó 4 a 3 para los soviéticos, que lo dieron
vuelta después de irse 3 a 1 abajo al entretiempo.
Algunas versiones sugieren que el
escritor se inspiró en lo que le contaron sobre el partido entre
Arsenal y Dynamo para escribir este ensayo. Eso no se sabe, pero lo
que sí es cierto es que en el texto, el autor asegura que “(...)
en el partido de Arsenal, según me contó
alguien que estuvo allí, un jugador ruso y uno británico se
pelearon a trompadas y el público abucheó al árbitro. Y no podía
ser de otra manera. Siempre me sorprende cuando escucho que las
personas dicen que el deporte crea buena relación entre las
naciones, y que si solamente las personas comunes del mundo se
cruzaran en una cancha de fútbol o de cricket, no tendrían
inclinaciones de enfrentarse en un campo de batalla”.
Al final, Orwell era bien parecido a
Borges...
PD: El ensayo tiene demasiadas citas
interesantes en las que explica su relación con el deporte en
general como para ponerlas todas acá, pero recomiendo que lo lean.
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