14 de agosto de 2011

Todo calculado:


Ya está. Cesc va a usar la '4' de Barcelona. No hay nada que hacer. Es lo que el jugador quería, aunque, como dijo Arsène Wenger, estaba dividido entre dos amores: su club de origen y el que le dió la oportunidad de convertirse en uno de los mejores volantes del mundo.


Las contrataciones de Fábregas y de Alexis Sánchez, lo afianzado que se mostró Javier Mascherano hacia el final de la temporada pasada, y la continuidad de todos los jugadores más importantes, significan que Barcelona tiene muchas chances de continuar como el dominador del fútbol español y europeo.

Algunos 'especialistas' habían dicho que la compra de Cesc era caprichosa y que no tenía sentido. Argumentaban que no valía la pena el gasto porque probablemente no será titular, y deberá pelear el lugar con Keita y Thiago (de gran pretemporada). Pero el periodista español Martín Perarnau tiene algunas ideas que justifican el fichaje.


Pero hay otra veta para analizar la transferencia de Fábregas. Cesc no es el primer jugador que Wenger le vende al Barça. El ex capitán de Arsenal será el sexto gunner que, desde la temporada 2000/2001, se pondrá la camiseta azulgrana después de vestir la del equipo del norte de Londres.


Todo empezó con la doble transferencia de Mark Overmars y Emmanuel Petit en 2000, que le costaron a los catalanes £32 millones. Tres años después, fue otro holandés, Gio Van Bronckhorst, el que cambió Inglaterra por Catalunya como parte del pase de Fábregas a Arsenal. En la temporada 2007/2008 Thierry Henry dejó el club por £19 millones. Y en 2009, el bieloruso Aliaksandr Hleb se fue al Barça por £14 millones.

Con los £30 millones (más £5 de variables) que Wenger aceptó por Cesc, la suma gastada por Barcelona en jugadores de Arsenal ronda los £100 millones en once años, un número demasiado importante como para que sea casualidad.


Una posible explicación puede estar relacionada con que los dos clubes tienen una forma similar de jugar al fútbol. Esa similitud significa que los jugadores de Arsenal tendrán menos inconvenientes para acostumbrarse al “Paradigma Guardiola” que los que lleguen de otros equipos. David Villa (usual titular de la selección española) e Ibrahim Afellay (de la cantera de Ajax, espejo en el que se fijó La Masía), cumplen con la misma premisa y no tuvieron problemas para acomodarse al mejor equipo del mundo.

Pero Dmitro Chigrinski y Zlatan Ibrahimovich, que llegaron juntos en 2009, y fueron criados futbolísticamente de otra manera, sí tuvieron inconvenientes y no se adaptaron.


Arsenal hace algo parecido al Barsa, pero con los juveniles. Como Wenger es un un experto en 'cazar' talentos jóvenes, La Masía es uno de sus lugares preferidos. Fábregas es el ejemplo más importante de adolescentes que cambiaron España por Inglaterra con promesas de fútbol de primer equipo, pero Fran Mérida (vendido a Atlético Madrid en 2010) y Jon Miquel Toral (actualmente en la reserva) también tienen pasado catalán.


Es lógico que cuando Arsenal o Barcelona buscan reforzarse se fijen en clubes con una idea similar a la propia. De esa forman se ahorran una buena parte del tiempo que le suele llevar a los futbolistas acostumbrarse a las nuevas circunstancias. El ejemplo más claro de esto es Mascherano. El ex Liverpool le tardó media temporada acomodarse (pero cuando lo logró, fue uno de los jugadores más útiles para Guardiola). Eso no va a pasar con Fábregas. Su adaptación va a ser inmediata, no sólo porque conoce a la mayoría de sus compañeros, sino además porque toda su vida jugó a lo mismo que juega Barcelona.

1 comentario:

  1. Está muy bien. Usted escribe muy bien. Detalles: usa tres veces la palabra "Pero" para arrancar un párrafo. En una de esas oportunidades habla de las ideas de un periodista español, aunque no las expone ni deja un link para acceder a ellas.

    La palabra "dio" va sin tilde. Como regla general recuerde: fui, fue, vio, dio, va, da, vi, di y fe van sin tilde.

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